TDA/TDAH

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¿Qué es el trastorno déficit de atención - TDAH?

El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es un trastorno neuropsiquiátrico que afecta tanto a niños como a adultos. Se caracteriza por dificultades persistentes en la atención, la impulsividad y la hiperactividad en el transcurso de una actividad a lo largo de un período estable, es común observar ciertos comportamientos que tienden a manifestarse durante la niñez, particularmente entre los 6 y los 12 años. Estos comportamientos muestran una intensidad y frecuencia significativas, impactando de manera adversa en el desempeño del niño. Generalmente, esta situación se identifica cuando los niños inician la etapa primaria, coincidiendo con las dificultades en el ámbito académico y la aparición simultánea de disfunciones sociales.

A medida que el niño se desarrolla, es posible notar cambios en la presentación de los síntomas, los cuales pueden experimentar variaciones o disminuciones. Se estima que aproximadamente el 8% de los niños continúan enfrentando problemas durante la adolescencia, aunque solo un rango del 30-65% sigue lidiando con estos desafíos en la edad adulta.

Se identifican tres tipos de TDAH, según el síntoma que predomine más en el niño:

Tiene algunos puntos en común con el Trastorno Disocial y ambos se clasifican como trastornos por déficit de atención y comportamiento perturbador.

Causas del trastorno déficit de atención - TDAH con o sin hiperactividad

Las razones detrás del desarrollo del Trastorno por Déficit de Atención se atribuyen a una combinación de factores genéticos, neurobiológicos y ambientales:

Existen sólidas evidencias que respaldan la importancia de la genética en la manifestación del TDAH. Estudios han indicado que existe una tendencia hereditaria en este trastorno. – La probabilidad de desarrollar TDAH se incrementa si un familiar cercano, como un padre o hermano, también experimenta el trastorno.

Se han observado disparidades en la estructura y actividad cerebral de individuos con TDAH. Específicamente, áreas vinculadas con la atención, la inhibición de impulsos y la regulación del movimiento pueden presentar variaciones. – Alteraciones en neurotransmisores como la dopamina y la noradrenalina también han sido vinculadas al TDAH. Estos neurotransmisores desempeñan un papel crucial en la regulación de la atención y el comportamiento.

  • Consumo de sustancias durante el embarazo
  • Complicaciones durante el parto
  • Prematuridad y bajo peso al nacer
  • Infecciones e inflamación prenatal
  • Exposición a sustancias tóxicas ambientales
  • Factores nutricionales prenatales
  • Estrés materno durante el embarazo

Síntomas del Trastorno por Déficit de Atención con o sin Hiperactividad

Es importante destacar que los síntomas del trastorno por Déficit de Atención deben manifestarse de manera persistente y afectar significativamente el funcionamiento diario en la escuela, el trabajo o las relaciones personales para que se considere un diagnóstico de TDAH. Además, la presentación de estos síntomas puede variar entre los subtipos de TDAH, que incluyen predominantemente inatento, predominantemente hiperactivo-impulsivo y combinado.

El diagnóstico del TDAH debe realizarse por profesionales de la salud mental basándose en una evaluación exhaustiva que incluya información de múltiples fuentes, como padres, profesores y, en algunos casos, pruebas psicométricas.

Entre los síntomas más frecuentes en el TDAH encontramos:

  • Desafíos para mantener espacios ordenados y organizar objetos personales.
  • Dificultad para seguir rutinas diarias, como la higiene personal y la gestión del tiempo.
  • Mayor riesgo de desarrollar trastornos de ansiedad, depresión u otros problemas de salud mental comorbidos.
  • El impacto del TDAH en la salud mental puede afectar la calidad de vida en general.
  • Pueden surgir problemas de salud física debido a estilos de vida menos saludables asociados con la impulsividad y la falta de organización
  • Dificultades para establecer metas a largo plazo y seguir planos para el futuro.
  • La impulsividad puede afectar la capacidad de tomar decisiones que beneficien a largo plazo.
  • Dificultad para evaluar de manera realista el propio rendimiento y reconocer las propias fortalezas y debilidades.
  • Dificultades para mantener la atención en tareas que no son de interés inmediato.
  • La atención puede desviarse fácilmente, afectando la productividad y el rendimiento en diferentes situaciones.

Estos problemas, cuando se abordan de manera adecuada con estrategias de manejo y apoyo, pueden contribuir a mejorar la calidad de vida de las personas con TDAH. Es fundamental tener en cuenta que la intervención temprana y un enfoque integral pueden marcar una gran diferencia en el manejo de estos desafíos a lo largo del tiempo.

Tratamiento para el Trastorno por Déficit de Atención con o sin Hiperactividad

El tratamiento se basa principalmente en dos líneas: terapias conductuales y tratamiento farmacológico, puede optarse por una combinación de ambas o intentar primero las terapias conductuales antes de pasar a la toma de medicamentos.

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