Los alumnos con altas capacidades tienen derecho a ser atendidos
Son muchos los que afirman que entre los alumnos más capaces se dan grandes porcentajes de fracaso escolar, y que lo que podrían ser brillantes carreras universitarias se quedan por el camino.
Si consideramos el número de estudiantes españoles no universitarios (educación infantil, primaria y secundaria) y calculamos un modesto top 5% de ellos, la cantidad total resultante sería 350.000. Atendiendo a estudios oficiales de estudiantes realmente identificados encontramos que estos escasamente sobrepasan a los 4.000, lo que significa que menos del 2% de estudiantes que necesitan asistencia específica para desarrollar su potencial han sido identificados. Búsqueda de Talento en España (Tourón et al. 2000, 2002, 2004, 2005b).
Para muchas personas hablar de alumnos con talento, genialidad, altas capacidades , o términos similares, es sinónimo de garantía de éxito,sin embargo, la realidad muestra algo bien diferente, ya que un alto porcentaje de estos alumnos acaban engrosando las listas de bajo rendimiento, fracaso e incluso abandono escolar temprano. El aburrimiento, la desmotivación por el aprendizaje, los problemas de ansiedad, el aislamiento y el sufrimiento del niño al ver que sus intereses no coinciden con los de sus compañeros pueden ser factores decisivos en su proceso formativo
Nuestro sistema educativo es inflexible y esta diseñado para niños promedio, centra sus esfuerzos en la compensación de déficits, dejando a un lado la atención de las altas capacidades y que posee un sistema de adaptaciones curriculares ineficaz, falta de coordinación entre los distintos profesionales que lo integran, falta de formación en el área e importantes reticencias a la hora de realizar adaptaciones curriculares para los alumnos altamente capaces y además de carecer de programas de identificación temprana de estos niños a nivel nacional.
No podemos olvidar que, sean cuales sean las potencialidades de un niño (intelectuales, artísticas o físicas), éstas no se desarrollarán en plenitud si no reciben el estímulo y la ayuda adecuadas.
Lo fundamental es que los niños de alta capacidad puedan ser niños felices y que gocen de un desarrollo armónico de toda su persona; para ello tendrán que recibir, al igual que el resto de los niños , la educación que precisan.
Graña Saude aporta su granito de arena colaborando en el desarrollo de sus aptitudes y su potencial.